Los saqueos en el juego son cosa común y no hay jugador al que no le haya tocado padecerlos alguna vez....sin embargo, a pesar de a veces no tener un ejército suficiente para defendernos de los abusones, existen una serie de medidas que todo jugador inteligente puede tomar para evitar que lo tomen por granja.
1- ESCONDITES ALTOS:
Es la defensa básica contra los saqueadores, tener escondites bajos es como invitar a cada vecino de la isla a que se de una vuelta por nuestras ciudades y se sirva de nuestros materiales. Si el saqueador no puede ver lo que tenemos en nuestros depósitos, dificilmente se lance a atacarnos.
El nivel del escondite debe ser igual o superior al de la intendencia. Si tienen una ciudad nivel 10, el escondite debe ser de nivel 10 para arriba. Lo ideal es, con el tiempo, llevarlos al nivel máximo que es 32, pero con tenerlo igualado con la intendencia alcanza.
No olvidar que el escondite debe estar lleno de espías propios para que surta efecto.

2- UN BARCO DE GUERRA EN CADA PUERTO:
No hay ejército terrestre que pueda pasar por encima de un barco si viene desde otra isla...hasta un espolón solitario puede hacer rebotar a un ejército terrestre de 30.000 unidades. Si el enemigo los quiere saquear, lo obligan a mover su flota que es mas lenta y les da la posibilidad de mover los materiales o pedir ayuda.

3- DOS SOLDADOS EN CADA CIUDAD:
Si tienen un lancero en cada ciudad, obligan al rival a esperar 2 rounds antes de poder entrar en ella....si además tienen un hondero, obligan al rival a tumbar la muralla completa para poder entrar...
Esto les permite ganar tiempo para sacar materiales (entre 15 y 60 minutos) e incluso con suerte, evitar el saqueo.

4- NO AMONTONAR MATERIALES:
A menos que estén por realizar alguna ampliación que requiera muchos materiales, no tiene sentido llenar sus ciudades y exponerse a que se los roben.
Deben en todo momento dar la apariencia de desahuciados. Que si a alguno se les ocurre saquearlos se encuentre conque sus 180 barquitos vuelven vacíos y solos como Adán el día de la madre...

0 comentarios:
Publicar un comentario